Regalando creces

Al regalar un regalo empresarial, artículo promocional o regalo publicitario, no solo alegras al que lo recibe sino a ti mismo. A través del obsequio la empresa puede consumir stocks, fidelizar sus clientes, captar de nuevos, diferenciarse de la competencia, aumentar beneficios, posicionarse en el mercado y un sinfín de posibilidades más. Por eso no es ninguna tontería la afirmación: “regalando creces”.

Las posibilidades de regalos son casi infinitas. Puedes regalar: caramelos, complementos, bolsas /maletas/ mochila, textil, deporte, ecología, electrónica, calendarios/agendas, cosmética, escritura, gafas de sol, herramientas, hogar, juegos, motivos navideños, objetos de oficina, playa/picnic, utensilios para el vino y mucho más. Y todo ello personalizado con tu marca o motivo en Promopresent.com.

Es por toda esa variedad que está a tu alcance, con la que puedes sorprender a tus clientes y crecer como empresa. Es una de las estrategias de marketing más utilizada en los últimos años, va en aumento junto al resto de acciones Below the line (no convencionales). Además de ser muy resolutiva y económica (dependiendo del regalo).

Ahora, con la situación económica que está viviendo el país, parece que la solución a todo es recortar gastos y en especial en el departamento de marketing o publicidad. A corto plazo puede parecer la solución, pero si uno no se da a conocer o no está continuamente en la cresta comunicativa, rápidamente cae en el olvido y difícilmente es recuperable. Además, este tipo de acciones comunicativas lo que hacen a parte de ponerte en boca de todos, es vender. En época de crisis si no quieres desaparecer hay que vender, y para vender hay que ser conocido. Todo esto está afirmado por la mayoría de gurús, que sitúan la crisis como una etapa de posibilidades y crecimiento.

En definitiva, hay que seguir cuidando y mimando a nuestros clientes, porque a la que se sientan mínimamente desatendidos, huirán a la competencia. Ya que si no nos hacemos notar, nos olvidan. Pero mejor aún, piénsalo al revés, si todos dejan de comunicar y yo sigo, seré el más fuerte. Porque así me percibirán los consumidores, puesto que no tendrán noticias del resto.